Solicitan a Educación que subrogue al personal hasta que se realice un nuevo concurso público
SUBBÉTICA, 19/12/2019
Los centros de Secundaria, conservatorios y Escuela Oficial de Idiomas de siete municipios de la comarca de la Subbética se encuentran desde hace semanas sin servicio de limpieza a causa de la huelga que mantiene un centenar de trabajadoras de la empresa Tempo, una de las concesionarias de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía y que opera en este territorio, además de en otras localidades de la provincia como Pozoblanco.
La Coordinadora de Trabajadores de Andalucía -CTA- convocó en la plaza de El Coso de Lucena una concentración este jueves para denunciar esta situación y dar visibilidad al colectivo de trabajadoras afectadas. Según el secretario general de este sindicato en Córdoba, Francisco Moro, la empresa “ha desaparecido” adeudando a su plantilla “las nóminas de noviembre, la extraordinaria, y dentro de unos días también la de diciembre”.
Justo el final del primer trimestre sirve de contexto a este paro “al que ya se han sumado tanto los alumnos, como asociaciones de padres y claustros”, que, en algunos casos, “han decidido no realizar los exámenes” propios de esta época por el estado que presentan las aulas. “Los aseos están en malas condiciones” y en las aulas se acumula la suciedad y los residuos, precisó Moro, quien advirtió que “la huelga será indefinida”, aunque “con servicios mínimos”, hasta que se solucione este conflicto laboral.
Una resolución que pasa porque el Ejecutivo autonómico haga caso al escrito remitido directamente al presidente andaluz, Juan Manuel Moreno, a quien “le pedimos que la Junta absorba a estas trabajadoras” hasta que la situación se normalice. Algo que, en palabras del responsable sindical, no supone “ninguna ilegalidad” ya que la Administración “tiene en su poder el Boletín Oficial de la Junta para adoptar este tipo de medidas”.
UN SECTOR EN PRECARIO
La convocatoria de este jueves deja entrever las condiciones laborales de un sector que, de por sí, arrastra unos parámetros de precariedad que llegan a ser preocupantes. Según Moro, el convenio que regula la limpieza “es el peor de todos” ya que, en suma, “no alcanza el Salario Mínimo Interprofesional incluyendo complementos”. A ello se suma la diversidad de contratos que respaldan la relación entre trabajadoras y empresa, que “en muchos casos se encuentran en fraude de ley”, y el hecho de que el perfil de personas que ocupan estos puestos es principalmente femenino y “de especial vulnerabilidad social”, apuntó el responsable de CTA Córdoba.
