Acompañará a la tradicional corte de reina y seis damas en los actos oficiales, una medida encaminada a la eliminación de roles de género
CABRA, 26/06/2017
Guillermo González, delegado de Feria y Fiestas del Ayuntamiento de Cabra (FOTO: archivo)[/caption]
“Cabra es una ciudad abierta, tolerante y participativa”. Con esta premisa defendió ayer el delegado de Feria y Fiestas del Ayuntamiento de Cabra, Guillermo González (PP), la apertura de una convocatoria para la ampliación de la tradicional corte de honor de la Feria y Fiestas en honor de María Santísima de la Sierra, patrona de Cabra, que cada año se celebra entre el 3 y el 8 de septiembre, y que por vez primera sumará a la ya habitual configuración de reina y seis damas de honor el nombramiento de rey de las Fiestas. “Con ello queremos hacer pública la idea de que Cabra apuesta por la igualdad de género y por la eliminación de roles sexistas”, afirmó el edil, quien aseguró que esta propuesta “novedosa y ajustada a los tiempos actuales” ya se desarrolla en municipios cercanos.
La convocatoria recoge la posibilidad de que cualquier varón egabrense, mayor de 18 años y con residencia censal en la localidad, pueda optar a ocupar este único puesto que completa esta representación oficial que coordina el Consistorio. Para ello deberán presentar una fotografía de estudio de tamaño mediano, donde deberán consignar sus datos personales y un teléfono de contacto, hasta el próximo 19 de julio en el edificio consistorial. Una vez concluido el plazo la Comisión de Feria y Fiestas, donde están presentes los tres grupos políticos con representación municipal (PP, PSOE y PA) y representantes de colectivos vecinales, se reunirá para decidir quién ocupará por primera vez en la historia este puesto honorífico. “En este caso, el protocolo y la asistencia a los actos se adecuará a la presencia de un varón entre las siete mujeres que siempre han presidido nuestras fiestas”, apuntó González.
Algo que ha causado gran impacto entre la población local, con división de opiniones en las redes sociales entre ciudadanos que ven la medida con buenos ojos y quienes creen que, por el contrario, la incorporación de un joven a la corte rompe con la tradición local.
